Estudio sugiere que los gamers tienen un libido más bajo que otros hombres

Este artículo se publicó en Broadly, nuestra plataforma dedicada a las mujeres.

En un mundo post-Gamergate, jugar videojuegos a menudo implica una mala connotación. Por supuesto, hay muchos hombres (¡y mujeres!) que inocentemente pretenden librar batallas intergalácticas en sus apartamentos, aunque jugar se haya fusionado con un antifeminismo virulento y los trolls de internet en ciertos círculos. Se ha dicho mucho sobre el impacto de la cultura de los videojuegos en los puntos de vista políticos de los jóvenes, pero ¿los juegos también podrían tener un impacto en sus vidas sexuales?

Un nuevo estudio publicado en el Journal of Sexual Medicine examinó el vínculo entre los videojuegos y la salud sexual en hombres adultos. Por otro lado, los resultados del estudio parecen bastante favorables para la población gamer: Después de examinar a 396 hombres italianos, los investigadores encontraron que aquellos que jugaban videojuegos tenían menos probabilidades de reportar eyaculación precoz que quienes no jugaban.

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Pero el estudio también encontró que los gamers reportaron un menor deseo sexual. Una razón por la que esto podría ocurrir es porque los videojuegos son a menudo estresantes. "Podemos suponer que 'el estrés provocado por jugar' puede conducir a la hiperprolactinemia, lo que posiblemente produce la pérdida del deseo sexual", escriben los investigadores.

Ambos hallazgos, en particular, podrían estar relacionados. Los investigadores explican que los videojuegos proporcionan una corriente constante de dopamina, "la hormona del placer" que está involucrada en la estimulación de un orgasmo, por lo tanto los jugadores experimentan una respuesta disminuida del receptor. "Esto podría causar tolerancia en el reflejo eyaculatorio y un menor interés en las relaciones sexuales", añaden los autores.

En última instancia, el diseño del estudio no puede determinar qué causa menores niveles de eyaculación precoz y deseo sexual, y es necesaria una mayor investigación para determinar si los videojuegos son perjudiciales para la salud sexual de los hombres. En vista de que he sido una ávida jugadora toda mi vida, ¡en verdad espero lo contrario!" comentó a Broadly la autora principal del estudio, Andrea Sansone.

"Creo que los videojuegos podrían ser similares al ejercicio físico en estos aspectos: el uso ocasional podría tener efectos benéficos, pero cuando se cruza el umbral entre 'el uso ocasional' y 'el abuso crónico', podrían ocurrir consecuencias negativas. "Apenas estamos arañando la superficie de este nuevo campo de investigación: espero que tarde o temprano podamos producir resultados más sólidos. Mientras tanto, ¡seguiré jugando!"