Cuatro años antes de esto, a principios de diciembre de 2011, en Marburgo, Dmitrij tiene 20 años. Está nevando afuera pero en la clínica no pasan las estaciones. Dmitrij está esperando solo en una sala de reconocimiento, exhausto por la resonancia magnética que le acaban de hacer. El doctor solo necesita unos segundos para hacer su diagnóstico.Hola, me llamo Dmitrij Panov y voy a morir pronto. Suena extraño pero es la verdad.
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Pasa un mes —aunque parece más por el dolor— hasta que finalmente lo mandan al neurólogo. Dmitrij está jugando Tetris cuando, de pronto, se cae al piso. Cuando despierta, está de vuelta en la clínica de la universidad de Marburgo. La cirugía está planeada para la mañana siguiente. La espera con ansias, al igual que la radiación que le sigue. No más dolor, no más vómito, no más desmayos, piensa. "Nos vamos a encargar de esto", dice el doctor.Siente nauseas después de la radiación.Vomita otra vez.
Dmitrij se toma un descanso de seis meses de la universidad. Al principio, el tratamiento con radiación era cada seis semanas. Después, era una vez cada ciertos meses. En las consultas, siempre trata de hacer preguntas muy específicas a los doctores. Los doctores no tienen mucho tiempo para él. A veces el doctor le pregunta cómo se siente.En los días siguientes, aprendí sobre las ventajas de los anestésicos fuertes (¡las fotos!) y un catéter (ir al baño es cosa de plebeyos), volví a dar mis primeros pasos y salí arrastrándome al mundo diez días después. Luego la radiación (mñe) y la quimio (lo que sea) y por años, todo estuvo bien.
Si eso hubiera sido todo, no había estado tan mal.
Después de dos años sin cáncer, Dmitrij dejó de preocuparse al respecto. Pero solo puedes decir que la libraste cuando pasan cinco años y no recaes.Regresó a la escuela y volvió a reunirse con sus amigos para jugar videojuegos. Vio decenas de películas, participó en obras teatrales de la escuela y derrotó al parásito araña Ghoma de The Legend of Zelda. Volvió a discutir sobre películas en el foro Moviepilot y se reunió con algunos de los usuarios del foro en la vida real. La comunidad siempre ha sido muy importante para él. Cuando se enfermó, la noticia se corrió rápidamente por Facebook. La gente que solo lo conocía en línea, con la que solo había platicado, empezó a hablarle por teléfono. Dmitrij tenía 680 DVDs. Le encantaba Kill Bill, Moonrise Kingdom y Oldboy, el clásico surcoreano de Garon Tsuchiya. En algún momento, cuando muera, esas películas van a pasar a ser de alguien más. Ya decidió que su roomie se va a quedar con sus utensilios de cocina.En realidad, su vida no había cambiado mucho.En abril de 2015, un año antes de poder considerarse oficialmente sano, regresó al consultorio del doctor. Diagnóstico: una recaída, es decir, el mismo tumor en el mismo lugar. Otra operación, seguida de más radiación y quimioterapia. Es como si hubiera regresado cinco años en el tiempo. Otra vez tiene que hacerse una resonancia magnética cada seis semanas.Cisplatino NC 0.5 mg/ml – un tipo de medicina para tumores grandes y metástasis que no recuerdo.
Su blog se llama "Muriendo con estilo". Escribe una nueva entrada cada cuatro días. Quiere demostrar que lo incurable, lo irremediable, no es tan malo. Quiere dejar algo antes de morir.Hola, me llamo Dmitrij Panov y voy a morir pronto. Suena extraño pero es la verdad.
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Dmitrij tiene un meduloblastoma fase IV. La gente conoce este cáncer como "tumor de bebé" porque se presenta más que nada en jóvenes. Casi no se han hecho investigaciones en adultos y jóvenes como Dmitrij. El tumor se encuentra en el cerebelo. "Cuando es grande, provoca una retención del líquido cefalorraquídeo dentro del cráneo o hace presión en la corteza visual, afecta al equilibro, etcétera", dijo Dmitrij. Los doctores tienen que experimentar. Dmitrij quiere ser fuerte. Dice que está bien.
Poco a poco, la sensación de que nunca voy a salir de esta clínica se vuelve más fuerte. Es muy probable que empeore. Lo acepto. Pero todavía no. Por eso me molesta tanto que los doctores (como siempre) me hagan esperar. El dolor en la espalda, en las piernas y en el culo va y viene; el suero intravenoso se sigue saliendo. Sí, podría ser peor. No quiero describir mi reacción cuando pase. (29 de abril de 2016)
Entra a una clínica de rehabilitación, no a un hospicio, porque no va a morir inmediatamente. No quiere que le den una estimación de cuánto tiempo le queda de vida. ¿Qué le da miedo? La muerte no. Algunas personas muere a los 100 años, infelices. Él no va a llegar ni a los 30. "Pero viví plenamente", dijo. No se va a perder de nada y no necesita recorrer todo el mundo. Hay pocas cosas que lo molestan, como, por ejemplo: que nunca fue al buffet "come todo lo que puedas" de comida china que está en la ciudad de Bonn y que hay muchos videojuegos que no ha jugado porque todavía no han salido.Las cosas que antes me importaban ya no tienen sentido:
La universidad.
El sexo. (Julio de 2016, "Pregúntame lo que quieras" en Reddit)
Bas Zwesten, mayo de 2016: un día soleado en Hesse. Los pacientes de la clínica de rehabilitación salen a caminar al parque que está al lado. Se acuestan en el pasto. Dmitrij está atrapado en su habitación de la clínica de neurología, apenas puede moverse. La clínica tiene dos alas. Una para las personas con problemas mentales y otra para las personas que necesitan recuperar su fuerza física. No está seguro en cuál lo internaron.La última vez, escribí que no tenía miedo de morir. Quizá debí haber dicho, de estar muerto. Todavía hay un poco de vida cuando agonizas y a veces creo que la vida es lo que me da miedo. (11 de mayo de 2016)
Dmitrij fue dado de alta y regresó a casa el 9 de junio de 2016. Cuando muera, Sabine va a publicar la entrada final en su blog. De forma póstuma.Esta mañana sentí el dolor más intenso de toda mi vida. Se me calmó hace como una hora (gracias al paracetamol que me dieron para la fiebre). Un paquete completo, no importa por dónde lo veas. Sé que no es lo mejor pero al menos ya me puedo sentar sin tener que gritar constantemente por el dolor. Espero que siga así porque, en primera, me encantaría poder salir de aquí y, en segunda, porque no sé si pueda soportarlo otra vez. (4 de junio de 2016)