Los cigarrillos electrónicos podrían aumentar el riesgo de que te vuelvas adicto a la cocaína

La historia publicada el 3 de septiembre en el New England Journal of Medicine, tiene todos los ingredientes para ser un reportaje bomba (al menos, para los prohibicionistas). Esta investigación, además de ser decididamente contra el cigarrillo electrónico, es grande porque uno de los dos escritores fue merecedor a un premio Nobel.

Los autores del estudio, Eris y Denise Kandel, dicen que encontraron la “base molecular” de la nicotina que la hace ser una droga que abre puertas a otras. Unos ratones de laboratorio a los que se les dio cocaína, demostraron un comportamiento más adictivo a esta droga después de haber estado sometidos a ingerir nicotina durante siete días. En otras palabras, la cocaína resulta más adictiva para un ratón cuando éste ya tiene un vicio con la nicotina.

“La nicotina actúa como una puerta para otras drogas y ejerce un mayor efecto en la cocaína dentro de la secuencia de drogas que se utilizan a nivel global”, escribieron.

Por su parte, el hallazgo es interesante y, si consumes nicotina y quieres meterte en el cuento de la cocaína, es mejor que lo tengas presente. Pero, hacia el final del estudio, los Kandel sugirieron que su investigación se podría utilizar para una regulación más estricta de los cigarrillos electrónicos.

“Los cigarrillos electrónicos tienen los mismos efectos en el cerebro que la nicotina y suscitan el mismo riesgo de caer en la adicción de otras drogas”, afirman. “Nuestra sociedad necesita concentrarse en el daño que generan los cigarrillos electrónicos en el cerebro, especialmente, en personas jóvenes, porque tienen el potencial de crear una nueva generación adicta a la nicotina. Los efectos que encontramos en los ratones son más notorios en los animales adolescentes”.

No hay razón para dudar de los alcances científicos de los Kandel. Ellos sugieren que, si bien la adicción es un comportamiento aprendido, entonces, tiene sentido que si eres adicto a una cosa exista mayor riesgo de que te vuelvas adicto. Puede que no lo creas, pero la conclusión está fundamentada en su trabajo.

“El hecho de que los cigarrillos electrónicos sean una puerta para el uso de cigarrillos combustibles y drogas ilícitas, es incierto, pero es una posibilidad cercana”, explicaron. “Nuestros datos demuestran, efectivamente, que los cigarrillos electrónicos no solo previenen de fumar sino que traen consecuencias negativas para la salud y aumentan el riesgo de ser adicto a drogas ilícitas”.

Por otra parte,  el argumento de que alguien adicto a la nicotina necesariamente cae en la cocaína (o en drogas más duras), es debatible. Los Kandel aseguran que menos del 10% de los adictos a la cocaína nunca han fumado cigarrillos o han empezado a fumar simultáneamente.

 Pero esto tiene que ver, de manera más directa, con aspectos sociales, como el hecho de que alguien que huele cocaína, probablemente, no va a temerle a fumarse un cigarrillo de vez en cuando.

 El punto aquí no se trata de que, intrínsecamente, sea más difícil conseguir los cigarrillos electrónicos que, según los grupos de salud, son menos dañinos que los cigarrillos combustibles.