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Música

And The End of Everything te da una idea a qué sabe la muerte

Este par es la nueva bomba en la ciudad.

Alfredo Ramírez y Alan Hernández son dos productores mexicanos que, a pesar de tener proyectos por separado, decidieron juntarse para generar sonidos fuera de este planeta. Alfredo tiene Me & Myself, y lo que hace bajo este nombre es música densa que abre hoyos negros a través de vibraciones. Alan, por otro lado, arma buenas fiestas inyectándoles beats frescos y acelerados a través de No Light.

And The End Of Everything, es la bomba que se desató después de que Alan y Alfredo armaran el primer track del proyecto juntos. A pesar de que ambos tocan líneas de música completamente diferentes, cuando esas polaridades musicales se juntan, lo único que se puede esperar es, encontrar a través del sonido, una energía magnética que te muestra el paraíso después de la muerte. Tomamos de pretexto su presentación en el primer aniversario de Cuatro Veinte y el nuevo lanzamiento de su sello discográfico Moeb, para hablar con Alfredo sobre el final de todo y los Apocalipsis personales.

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THUMP: Cuéntame un poco acerca del proyecto. 

Alfredo: And The End Of Everything nació ya hace un rato, año y medio más o menos. Fue bastante gracioso porque al principio Alan  y yo no nos caíamos bien . Chocábamos bastante. Un día, por azares del destino, nos juntamos a escuchar música y nos dimos cuenta que teníamos gustos similares. Fue por eso que decidimos comenzar con este proyecto y hemos ido evolucionado. Ahora, por ejemplo, nos estamos preparando para generar nuevas propuestas para el próximo año. Creo que algo que nos caracteriza es que mezclamos diferentes géneros dentro de nuestra propuesta. A mí me gustan los sonidos densos o espaciales y Alan se inclina mucho más por los sonidos latinizado, y a pesar de ser opuestos, cuando los juntamos en nuestra música quedamos muy satisfechos con el resultado.

¿Tienen algún proceso creativo? ¿Cómo le hacen para hacer la música entre los dos siendo tan diferentes? 

Ponemos muchos límites, sobre todo cuando algo no nos gusta lo trabajamos y respetamos la opinión del otro. Generalmente lo que hacemos es mezclar géneros rarísimos. A los dos nos gusta la música progresiva y por lo mismo siempre intentamos hacer tracks que no se queden siempre en lo mismo. Creo, como productor, que aunque el resultado final es lo más importante, el proceso creativo es parte esencial del producto. Cuando No Light y yo estamos en el estudio, además de tomar distintas influencias, también procuramos hacer uso mínimo de sampleos. Tratamos de siempre recrear todo en base a la grabación de campo y diseño sonoro. Esto hace que nuestra música tenga un contenido auténtico y distintivo que al final de todo, es lo que buscamos.

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¿Cuál es el final de todo?

El final de todo para nosotros es algo caótico que al mismo tiempo es bello. Un ejemplo claro es el contexto  actual de México, lo que está pasando con todas las manifestaciones y toda la violencia que existe, podemos darnos cuenta que a pesar de ser un problema caótico que tiene la posibilidad de transformarse en algo bello a través de la música o cualquier otro tipo de arte. Creo que el entorno influye mucho  en la música, por ejemplo, lo que estamos haciendo ahora a pesar de no tener sonidos agresivos, sí son sonidos densos que reflejan lo que está pasando. Justo por eso decidimos titular el proyecto And The End Of Everything, porque para nosotros, nuestra música siempre termina en algo bellamente caótico.

¿Crees en el Apocalipsis? 

¿En el fin del mundo?, no.  En el Apocalipsis personal sí.

¿Qué pasa en el Apocalipsis personal? 

Es cuando las personas dejan de hacer  las cosas que les gustan. El Apocalipsis  personal viene cuando te rindes.

¿Cuándo fue la primera vez que escuchaste música electrónica?

Fue en un reven hace como 9 años,  cuando apenas el psytrance estaba comenzando. Ese día en la fiesta había un sistema de sonido impresionante.  Sentir la música en esa magnitud fue lo que me impulsó a realmente quererme dedicarme a esto.

¿Cuál ha sido el mejor lugar hasta ahora en el que has tocado? 

En Tulum un amigo tiene un jardín secreto y se arman buenas fiestas. He tocado dos veces ahí. También me latió mucho una vez que fui a Guadalajara a abrirle a Bonobo. Ese día la banda andaba muy prendida, lo disfruté bastante.

Si tuvieras que ponerle un color y una textura al tipo de música que hacen, ¿cuáles serian? 

El color definitivamente seria entre guinda y negro. Sobre texturas, podría decirte que nuestra música puede sentirse  al principio como una frazada para bebé pero al  final definitivamente el sonido trasmite sentimientos rasposos. Música todo terreno.

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