Historias desde la trinchera llamada cámara fotográfica

Existen varias formas de ver y cubrir un evento. Puedes vivir una fiesta o concierto como publico, organizador, artista, fotógrafo, etc. Cada uno lo va a ver diferente y vivir diferente, por obvias razones todos lo van a contar diferente.  En esta ocasión les contare mis historias engarzadas desde mi trinchera llama cámara fotográfica.

Muchos pensaran que cubrir un evento como fotógrafo es cosa fácil… literalmente piensan que uno se pone en su trinchera y nos soltamos a disparar a sangre fría toda la noche.  Las frases más comunes que recibo con mis amigos o conocidos al decirle que cubriré un evento son las siguientes:

"Uy… peda y concierto gratis, ya quisiera ser tu."

"¿Te pagan por apretar un botón?" (comúnmente las personas no cercanas a ti)

"Saca las cortesías"

"¿Me pasas a la zona A?"

Estoy seguro que cualquiera que ha cubierto un evento como fotógrafo ha escuchado mínimo una vez alguna de las frases anteriores. Muchos contestamos amablemente y con una bella sonrisa fingida sus preguntas.  Como respuesta  a la primer frase tengo algo que decirles, nos cuesta mucho trabajo entrar a un evento; así que eso de que vamos gratis no es cierto muchas de las veces.

¿Peda gratis?… jajaja ¿Dónde? O inviten por lo menos. Como fotógrafo en un evento es raro que los organizadores te regalen si quiera una botella de agua, en otras se portan de maravilla y hasta barra libre de  bebidas energizantes  con silloncitos tienes, muchas gracias aquellos organizadores que piensan en la prensa, todos estamos eternamente agradecidos con ustedes.

No nos pagan solo por apretar un botón, muchas veces ni nos pagan. Lo hacemos por amor al arte, aun que suene para unos algo triviado.  La mayoría de las veces no me pagan, voy por que tengo la oportunidad de juntar dos de mis pasiones en una sola noche: La música y la fotografía.

Eso es lo que tengo que decir por ahorita sobre lo que se piensa de alguien que va a cubrir un evento. Hay una infinidad de cosas más que decir y contestar, pero por ahorita lo dejamos aquí. Nos pasaremos a lo bueno, al chisme, el cotorreo. Las desventuras y aventuras que nos ha tocado vivir como prensa y fotógrafos. Para que luego no piensen que este mundo es de color rosa., se sufre en ocasiones como en cualquier otro trabajo que se te ocurra.

Hagamos esto con orden cronológico.  Todo empieza al momento de enviar un mail al contacto de prensa del evento, la mayoría de las veces se tardan semanas en contestarte y otras más ni siquiera te envían un "Gracias por participar".

Digamos que te contestan y eres bienvenido a cubrir el evento. El día del evento llega y vas al venue a la hora indicada para registrarte… ¡PUM! Al llegar descubres que el registro de prensa se retraso … dos horas de tu vida desperdiciadas, ni siquiera te puedes ir a comer o dar la vuelta, debido a que no sabes a que hora empezaran a registrarte. Eso si… el que te va a registrar puede llegar tarde y si no estas a la hora que el llego, ni modo te quedas fuera, sin importar de haber llegado a la hora indicada con anterioridad. Una vez llegamos al venue y este ni siquiera estaba abierto jajaj ay… los organizadores son unos loquillos.

Eso es una opción, puede que llegues a la hora y después de un ahora de estar dando vueltas por que los del lugar no saben donde es la mesa de prensa o desconocen totalmente de existencia.  Muchas veces te hacen dar tantas vueltas que parece que fuiste y regresaste de Mordor. Llegas y te encuentras con una interminable fila de fotógrafos molestos, por que el registro tarda horas, ya que alguien perdió la lista y las fueron a imprimir de nuevo; o bien los que están en el registro no pueden hacer más de dos cosas al mismo tiempo.  Hay que tener cuidado con los fotógrafos que han perdido su pasión, llegas y preguntas amablemente si es la fila de prensa (Tu ya viste que carga una cámara y solo lo haces para rectificar) al parecer le  acabas de decir la peor ofensa que te puedas imaginar, voltean y te barren con la mirada.  Al parecer en algunos aplica que mientras más grande su lente más chico su pi%&…

Después del calvario que acabas de pasar, por fin estas adentro.  Esta es la parte bonita de la  noche. La luces se reflejan en tu lente la música empieza a subir de volumen y de repente ¡Boom! Un YOLOescuincle pidiéndote una foto, en realidad no me molesta eso… UNA foto, el problema es cuando piensan que eres su fotógrafo personal, ahora tienes que tomarle fotos con todas sus mejores poses y aparte con cada uno de sus amigos.  Cuando les dices que ya y te vas, todavía te la mientan. Si me ven en un evento con plena confianza pídanme una foto, me encanta ser parte de plasmar con ustedes toda una noche en dos mil pixeles y revivir todas esas experiencias.

Basta de desventuras, sigamos con algo más alegre.  El momento más feliz al momento de cubrir un evento es cuando logras sacar esa foto que captura toda la energía de esa noche en un solo frame. El éxtasis que te produce eso es inigualable, es como si escucharas tu drop favorito.

Tener la oportunidad de cubrir eventos es una oportunidad que valoro mucho en mi vida.  A cualquiera que cubre un evento aprendemos algo nuevo cada noche. Poder ver la fiesta desde un lente te da otra perspectiva, he tenido la oportunidad de vivir fiestas como público, fotógrafo, artista y hasta detrás de una pantalla con un streaming. Esta oportunidad ha expandido mi forma de apreciar el mundo de la electrónica de gran manera y me deja ver como va evolucionando poco a poco.

Las historias detrás de esta trinchera son infinitas, apenas les conté la punta del iceberg, pero creo que es suficiente en esta ocasión. Esperen una segunda parte con más historias de que pasa cuando estas en los pits de la fotografía en fiestas/conciertos.  Si me ven en eventos, acérquense y  puede que tu historia sea plasmada aquí.

Las mejores fotografías no son desde la primer fila (zona de prensa) son desde el público, con ustedes.  ¡Nos vemos en el dancefloor!