Así se siente emborracharte a través de los ojos
Todas las fotos son de Ann Charlott Ommedal.

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Así se siente emborracharte a través de los ojos

Los visitantes no tienen que tomar un sorbo del líquido, sino simplemente respirar.

*Este artículo se publicó originalmente en Munchies.

Estoy usando un poncho de plástico, las luces cintilan, un olor dulce se siente en el aire (¿Es eso marihuana?) Y acabo de ver una serpiente pitón albina en el baño de chicas. Me siento como si me hubiera tropezado con una nueva versión del video "I'd Do Anything For Love (But I Won't Do That)" de Meat Loaf.

En realidad estoy en el sótano de lo que solía ser un monasterio junto a la catedral de Southwark a la orilla del río Támesis en Londres para la máxima experiencia de coctelería mezclada con una instalación de arte por Bompas y Parr, el dúo de arte de comida reconocido por sus famosos paisajes de gelatina y máscaras mortuorias de chocolate. Ese olor dulce es en realidad gin-tonic vaporizado, las luces son para ayudarte a ver a través de la nube de aire húmedo con infusión de alcohol, el poncho es para evitar que mi ropa se dañe, y la pitón albina… bueno, está ahí por diversión. Si esa es tu definición de la diversión.

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Para Sam Bompas, que forma una mitad de la asociación con sede en Londres con Harry Parr, sin duda lo es.

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Ponchos utilizados para no derramar alcohol.

"El objetivo principal de cada proyecto es tratar de hacer algo con lo que la gente puede divertirse. 'La diversión' es una palabra muy importante", me dice, añadiendo que la serpiente blanca es algo de lo que está particularmente orgulloso. "Le hicimos una vitrina que se parece a Rapture, así que, ya sabes, es un paisaje apocalíptico. Ruinas góticas, arena negra, puesta de sol en el fondo, y la pitón albina".

Conocido como "La arquitectura alcohólica" el proyecto de Bompas y de Parr utiliza humidificadores para transformar licores y mezcladores en una fina nube. Los visitantes no tienen que tomar un sorbo del líquido, sino simplemente respirar (O no –la niebla también puede entrar a través de los ojos) para que el alcohol penetre en el torrente sanguíneo, sin pasar por el hígado. Se le recomienda a los visitantes "respirar de manera responsable" y se les asignan períodos de una hora para evitar la sobredosis de, ahm, aire.

Después de muchas inhalaciones diligentes, no estoy del todo convencida de que estoy tan borracha como estaría si me hubiera tomado un shot de la forma convencional, pero respirar en vez de tragar un gin tonic parece mejorar los sabores botánicos.

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A pesar de lo ridículo de intentar ingerir un cóctel vaporizado a través de tus ojos mientras usas un Pack-A-Mac, Bompas dice que la arquitectura alcohólica tiene sus raíces en el realismo.

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"Todo lo que hacemos es real. No tenemos personas de Alicia en el país de lasmaravillasdisfrazados de conejos", explica Bompas. "Es una fantasía descarada y perturbadora, pero tiene mucho más que ver con el lugar y con la historia que cualquiera de los restaurantes americanos falsos que se instalan en Londres. A pesar de que podría verse cool en Instagram –Oh, mira, estoy bebiendo de un cráneo– espero que también haga pensar a la gente".

Tropezando a través de la neblina de alcohol tan espesa que no puedo ver más allá de un metro en frente de mí, no creo que muchos pensarán muy profundamente en el significado interno del proyecto.

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Y a medida que el vapor se condensa en un charco en el suelo, listo para ser trapeado y desechado al final de la noche, me pregunto si este estilo excesivo de los años ochenta es demasiado para la Inglaterra actual obsesionada con la austeridad. Bompas ve las cosas de manera diferente.

"Nuestra filosofía del estudio es la de William Blake: El camino del exceso conduce al palacio de la sabiduría. Nos gusta empujar los límites lo más posible y luego reflexionar sobre ello y aprender de ello", dice. "Me gusta crear cosas realmente fabulosas, esas que escuchas que solo las estrellas de rock lo hacen y crear un escenario donde cualquier persona pueda en realidad ser la estrella de rock por una noche".

Nadie puede negar el atractivo de la democratización de la forma de vida de una estrella de rock, pero no puedo dejar de preguntarme: ¿Por qué? ¿Por qué llenar una habitación con gin tonic vaporizado? ¿Por qué poner una serpiente en los baños? ¿Es simplemente porque pueden?

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"Creamos momentos para las personas que de otro modo no podrán tener y permitir que sientan que tienen historias que contar sobre cosas extraordinarias", explica Bompas. "Teatro, comida, ingeniería, arte –No me importa cómo se defina, siempre y cuando las personas sean capaces de decirle a sus amigos la próxima vez que estén en el pub: No creerás lo que hice el pasado semana, fui a un lugar y bebí de un cráneo humano".

Oh, sí. Hay un cráneo humano detrás de la barra. Además de tomar alcohol a través de las membranas mucosas de tus ojos, el experimento de mixología de Bompas y Parr le permite a sus clientes pedir cócteles hechos con espíritus elaborados por monjes, uno de los cuales te lo sirven en un cráneo real.

"Hubo un momento incómodo cuando lo estaba probando y un poco de cráneo se fue a la parte posterior de mi garganta, porque no lo habíamos rediseñado para beber todavía", recuerda Bompas. "Ese fue un día interesante en la oficina".

La "oficina" de Bompas y Parr es en realidad un estudio de 14 personas trabajando en nuevas ideas tanto para la "diversión" como para los clientes.

"En este momento estoy investigando mucho sobre la adivinación mediante huevos", añade Bompas. "Consigues huevos y los frotas sobre el cuerpo desnudo de alguien para curarlo de sus enfermedades".

Al final de la noche, conforme salgo del calabozo con niebla de ginebra, el pelo húmedo y la piel ligeramente pegajosa, cobra sentido que la pareja que piensa que deberíamos estar respirando nuestros cócteles también estaría explorando la logística de usar huevos.