Throwing Shade y Black Merlin: grabaciones de campo que unen al oriente y occidente.
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Música

Throwing Shade y Black Merlin: grabaciones de campo que unen al oriente y occidente.

Así se captura el sonido de un país entero.

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Este post se publicó originalmente en THUMP UK.

Resulta que transladar sonidos a palabras en una página en blanco es realmente difícil. Esa dificultad puede explicar la proliferación de frases como "escribir sobre música es como bailar sobre arquitectura", o mejor aún, "escribir sobre Burial es como imaginarse que estás en un autobús nocturno en al sur de Londres, sentado en la parte de atrás y está lloviendo afuera pero aún puedes escuchar los sonidos de las sirenas sobre las rolas sonando desde tu Sony Discman".

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Así que lo que hacemos, ahora en el 2017, concientemente o no, es darle la vuelta a una disección directa de la música, apuntando en cambio por una especie de evocación. Destilamos nuestras palabras a un nivel básico y tabajamos desde ahí. El concepto de electrónica tiene una presunta relación con los espacion urbanos, típicamente en occidente. Por instinto relacionamos la música electrónica y la cultura club en un mundo gris de concreto, amueblado con la ansiedad de alienación marcado por la liberación del hedonismo.

Solo que, ¿qué pasa con la música que no cabe en esa fórmula? ¿Qué pasa cuando la música electrónica de la que le quieres hablar al mundo no se adhiere a las nítidas convenciones genéricas que hemos creado en favor de la simplicidad?

Uno de los álbums que llegó a mí durante el 2016 fue Hipnotik Tradisi, del productor londinense Black Merlin, cuyo nombre real es George Thompson. En su LP Island of the Gods, Thompson se encontró a sí mismo trabajando con grabaciones de campo capturadas en una expedición por Bali, Indonesia. Yo estaba similarmente emocionado de que el segundo volumen de Electronic Recordings From Maui Jungle de Anthony Child llegara a las tiendas durante el periodo de festivales. Como Black Merlín, Child (quien también produce bajo el nombre de Surgeon) reemplazó el techno espartano y trabajó con especial soltura únicamente con la maquinaria análoga ha utilizado en sus lanzamientos previos.

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Pensar que el trabajo de Thompson o de Child es revolucionario, sería ignorar la ya formidable historia de tantos músicos electrónicos que salen al mundo a buscar sonidos y las grabaciones de campo son su fuente de inspiración estética. Dan Mitchell, la cabeza del sello de Island of Gods, sabe lo influyente ha sido el apoyo de Jon Hassel (quien fuese colaborador de Brian Eno) en la música que se produce en su sello, así como lo fue el girar hacia un material más clubber con apoyo de Theo Parrish.

Hablando con Nabihah Iqbal, mejor conocida como la DJ y productora Throwing Shade, sobre las grabaciones de campo que hizo en un viaje reciente a Japón, ella tocó el punto de que "el sonido orgánico de las grabaciones de campo, de alguien realmente tocando un instrumento en la vida real, es algo que no puede ser re-creado de la misma manera que con los sonidos sintetizados. Es la misma razón por la que muchos productores se ven atraídos a samplear percusiones de viejos tracks de jazz o funk".

Fotografía: Throwing Shade

George Thompson parece que concuerda con la idea de Iqbal de que las grabaciones de campo deberían ser de mucho aprecio. "Lo grandioso de las grabaciones de campo es que ellas traen una atmósfera sonora especial que ninguna máquina puede replicar", me dijo. La "no-replicabilidad" de lo real no significa, como sea, que ambos no pueden trabajar juntos en una especie de armonía retorcida. "Yo encontré todo un nuevo mundo de oportunidades abrirse en mi proceso creativo", añadió, refiriéndose al momento en que empezó su propio proceso de síntesis.

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Iqbal quiere subrayar que en el pasado, la precedencia equivocada que se otorga al proceso creativo de los individuos, ha hecho que tradiciones y rituales enteros se vean ignorados, pasando desapercibidos y siendo muy poco apreciados. "Yo creo que es algo bueno para la gente el buscar ideas e inspiración en la cultura y tradiciones de los demás, pero necesitan darle su reconocimiento", nos contó. "¿Tu sabías, por ejemplo, que el RnB contemporáneo americano tiene sus raíces en las tradiciones vocales del Medio Oriente Árabe?"

Hipnotik Tradisi aborda este potencial. Es imposible experimentarlo como tal si no has visitado Bali. Los sonidos que usa, el arte en el que llega, incluso los nombres de los tracks están ligados totalmente a la flora, fauna y cultura balinesa. De hablar con Thompson y Mitchell, se puede ver que tratan las grabaciones con el mayor respeto posible; tanto en los campos de arroz como en los templos de Bali, así como en el estudio en Londres.

De hecho Mitchell vive en Bali, y fuera de estar grabando y lanzando música, dedica gran parte de su vida profesional a proyectos que ayudan a preservar la cultura tradicional Balinesa. "Las grabaciones", me dijo, "fueron hechas de una manera realmente colaborativa. La última cosa que quieres hacer es hacer las cosas al estilo colonial de 'tomaremos todo lo que podamos y nos iremos'."

El recordatorio más fuerte de este modo de vida puede verde en la decisión de usar como portada una pintura del maestro gamelan de la ciudad de Ubundi, Pak Ketut. "Trabajar con Ketut fue el highlight de las grabaciones para mi", dijo Thompson. Tristemente, Ketut murió un año después de las grabaciones –la portada del disco es un tributo no solo para alguien que dedicó su vida al sonido gamelán, sino para el hombre de familia que también llegaron a conocer Thompson y Mitchell. Hablando con Mitchell sobre la inesperada expansión y sorpresiva recepción positiva que el álbum tuvo, él suena más orgulloso al platicar de los mensajes en Facebook que recibe de los nietos de Ketut, quienes no pueden creer que un álbum que lleva la imagen y música de su abuelo está jugándose los mejores puestos en las listas de popularidad junto con artistas como Kanye West.

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En este respetuoso intercambio, la musica resultante es capaz de sobrepasar las limitaciones binarias de lo orgánico y lo electrónico y entra en el campo de lo extraordinario. Mitchell en particular es enfático en sus creencias de que la marca espiritual del Hinduismo central en la vida balinesa es la esencia de lo que hace que su música sea tan especial. "Ellos tocan para los dioses", dice. Thompson no es tan evidente, o no al menos en nuestras conversaciones, al hablar de las cualidades que capturaron la "magia" del lugar. "A veces, las cosas que interfieren en el momento (…) resultan ser las más mágicas. Las fallas, los errores, las motocicletas, los pollos y lo antinatural".

Kanye West y los maestros gamelos; la electrónica industrial y el latido de la vida en la selva; revelaciones kármicas y el tráfico atascado. Ya sea que atribuyas el encanto de esta música a cualidades espirituales o no, los espacios que navega son trascendentales por sí mismos. Estamos viviendo un tiempo en el que el presidente de un mundo libre está impulsado por un ego que le permite ver cosas en términos de lo "terrible" y lo "terrorífico", todo mientras Europa está envuelta por falsas narrativas de nosotros y "los demás". Música como ésta une mundos y florece en todo lo que hay en medio. Existe más allá del mecanismo que hemos desarrollado para hablar de la música. Es un recordatorio de que las diferencias existen para ser celebradas y aceptadas, y cuando es así, lo más inesperado y liberador emerge; con motocicletas, pollos y lo antinatural incluído.

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