April Nienhuis
Sigue a THUMP México en Facebook
Tengamos un instante de reflexión antes de terminar nuestro día y recordemos aquel momento especial de nuestra infancia cuando descubrimos que podíamos crear música en lugares inesperados.Esta pequeña nota va a la salud de todos aquellos que fuimos unos curiosos sonoros durante nuestra niñez; por todos aquellos a los que la maestra regañó en incontables ocasiones por no dejar de golpear el banco con el lápiz creando beats; por los que se aventaron el concierto de su vida en la regadera mientras hacían esperar a toda la familia para poder entrar al baño; por los que descubrieron que la lavadora puede ser un perfecto tambor; por los que grabaron infinidad de cassettes con rolas del radio y en especial, por los que su mamá les advirtió que se iban a machucar la lengua con el abanico por estar jugando a "hacer voz de robot".Si, tú. Te hablamos a ti. Si descubriste tu primer Auto-Tune gracias al abanico que refrescaba tus noches y ahora estás, de alguna u otra manera, involucrado en el mundo de la música, en THUMP México nos tomamos una cerveza a tu salud. No estás solo, somos muchos los que experimentamos de niños, fuimos poco comprendidos y hoy, a pesar de cualquier obstáculo, construimos una escena que amamos.Por todos los que iniciaron de maneras inesperadas en la música y por cuenta propia, se enamoraron de este camino… ¡Salud!Marcela Villanueva está en Facebook.Continúa leyendo:Mezclar de Licenciado: el tabú de mezclar sentadoLa clave de un buen DJ Set es una biblioteca bien organizadaDJ compartido… ¿vale por dos?
Tengamos un instante de reflexión antes de terminar nuestro día y recordemos aquel momento especial de nuestra infancia cuando descubrimos que podíamos crear música en lugares inesperados.Esta pequeña nota va a la salud de todos aquellos que fuimos unos curiosos sonoros durante nuestra niñez; por todos aquellos a los que la maestra regañó en incontables ocasiones por no dejar de golpear el banco con el lápiz creando beats; por los que se aventaron el concierto de su vida en la regadera mientras hacían esperar a toda la familia para poder entrar al baño; por los que descubrieron que la lavadora puede ser un perfecto tambor; por los que grabaron infinidad de cassettes con rolas del radio y en especial, por los que su mamá les advirtió que se iban a machucar la lengua con el abanico por estar jugando a "hacer voz de robot".
Publicidad