Un festival de música holandés hizo un mini Berghain al que nadie podía entrar

Este texto originalmente se publicó en THUMP EUA

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La fiebre por Berghain realmente existe amigos. Los fieles amantes de la tan codiciada meca del techno de Berlín han llegado ha ofrecer sobornos para entrar, han diseñado simuladores que imitan su infame política de acceso, y publicado vídeos de lo que pasa adentro (también conocidos como berghrotica). Existen guías ilustradas sobre cómo entrar, guías no ilustradas sobre cómo entrar, y existen perfiles sobre el lugar en todas partes, desde la revista Rolling Stone hasta The New York Times. Es el club más famoso en el mundo y es probable que incluso hasta tu mamá haya oído sobre él. Tu mamá odia los clubs.

¿Qué fue lo que dio lugar a esta obsesión? ¿Por qué nos preocupamos tanto por un club al que, muchos de nosotros, nunca vamos a poner un pie adentro? Más allá de la clásica música mundial y de las vibras dentro de su sagrada puerta, es probable que el concepto de rechazo contribuyera a la tan fascinante mística del club. El ser rechazado no es de lo más divertido, pero sin ello, eventualmente no habría una victoria.

Este fin de semana pasado, del 29 de julio al 1 de agosto, el festival de música holandés, Beyond, dio un poco de diversión tras usar la ética del rechazo constante de Berghain con una maqueta, un mini Berghain ubicado dentro del festival, con una fachada totalmente inspirada en el club. En conjunto con una organización con sede en Ámsterdam, Bauhaus (no hay que confundirse con el delicioso restaurante que pertenece a Eddie Huang, afiliado de VICE), la "Experiencia Berghenk" era bastante simple: te pones de pie en la fila para conseguir entrar, te rechazan, y así, vuelves a intentarlo. Aparentemente también hubo un DJ llamado Self que estaba tocando, algo, en algún lugar, dentro de la tienda a la que nadie entró. Recientemente publicó un video de su set de 12 horas, para los que no pudieron entrar.

"Es hora de poner en práctica tu paciencia en la línea de espera y tus habilidades dentro 'del camino de la vergüenza'", los organizadores escribieron en Facebook sobre la intención que tenía la instalación. "Hemos construido y simulado un determinado club de Berlín en medio del festival ('le hemos apodado Berghenk', agregaron ) incluimos cercas, una fachada, y un poco de techno." También incluyeron un manual que perfora por completo la ética del club incluso mucho más que en tu cerebro:

1. Párate en la línea
2. Se rechazado
3. Regresa a la línea
4. Se rechazado
5. Regresa a la línea
6. Se rechazado
7. Regresa a la línea
8. Se rechazado
9. Regresa a la línea

Al igual que muchos legendario fines de semana que se dan dentro de Berghain, es muy probable que nunca sabremos qué fue lo que pasó dentro de Berghenk este fin de semana pasado en Holanda. Por ahora, y tal vez para siempre, todo lo que tenemos son estas fotos y vídeos de mierda. Para aquellos que no lograron entrar, todo lo que tienen es su rechazo, y sueños. Tal vez así es como se supone que debe ser.

David Garber no entró a Berghenkon, siguélo en Twitter.